En la oreja existe un grupo de tres puntos para sangrar "Los Tres de la Oreja" (Er San). Uno está en el ápice de la oreja, otro en el punto medio del hélix y el último en el lóbulo (la zona opuesta al ápice). Son buenos puntos para liberar todo el sistema en general y para tratar el Exceso de Fuego que sube a la parte alta. Por lo tanto, son muy efectivos y tienen múltiples indicaciones, como por ejemplo:
dolor de cabeza, migraña, neuralgia del trigémino, trastornos de la ATM.
Problemas de visión: conjuntivitis, neuritis óptica, espasmos oculares o del parpado.
hipertensión, mareos, fiebre, resfriado, faringitis, enfermedades de la piel, acné, hiperhidrosis, prurito, gastroenteritis. Ansiedad, insomnio, depresión, palpitaciones.
Acúfenos, otitis, dolor de oídos.
dolor y adormecimiento de manos y/o de brazos (pinzamiento de un nervio), síndrome del túnel carpiano, dolor por mastectomía, dolor postoperatorio por extirpación de los ganglios linfáticos, glándulas sudoríparas de las axilas bloqueadas, dolor de cuello, dolor por espondilosis anquilosante, dolor de hombro, etc.
En nuestra práctica habitual solemos sangrar solo el punto del ápice de la oreja (bilateral), que es el punto principal y más potente de los tres. En una de nuestras visitas a China, vimos a un doctor que a casi todos sus pacientes antes de empezar el tratamiento les sangraba el punto del ápice de la oreja (bilateral) y no es de extrañar ya que como vemos es muy polivalente y eficaz.